Centro Niemeyer- Los cuernos de Don Friolera
Hace un siglo, Valle-Inclán ya sabía algo que hoy comprobamos a golpe de timeline: un bulo bien lanzado puede dinamitar vidas. En Los cuernos de don Friolera, un militar recibe un anónimo envenenado sobre su mujer y se precipita a una espiral de celos, honor y decisiones tan disparatadas que siguen sonando peligrosamente actuales.
Valle se divierte —y nos hace disfrutar— mezclando tragedia y humor ácido: del eco de los rapsodas griegos al teatro de títeres, de la sombra de Calderón a los celos shakesperianos, pasando por ese distanciamiento que luego haría famoso Brecht. Todo aderezado por la mirada afilada del pueblo, que observa, comenta… y sentencia.
Un clásico que vuelve como un espejo incómodo pero entretenidísimo: seguimos cayendo en las mismas trampas, pero ahora con Wi-Fi.

