Antonio Zambujo es, hoy por hoy, uno de los grandes embajadores de la música y la cultura portuguesas dentro y fuera de su país. Ha sabido renovar el fado y la tradición musical alentejana a través de un recorrido muy personal: primero mirándolas desde la óptica de la música brasileña —profundizando en la poética de figuras como Chico Buarque o Caetano Veloso— y, más tarde, incorporando pinceladas de jazz en los dos álbumes de estudio que grabó junto al guitarrista Yamandu Costa. La voz de Zambujo despliega múltiples matices sin perder nunca su raíz, demostrando una calidez y una versatilidad excepcionales.

Considerado uno de los mayores talentos de la guitarra, Yamandu Costa es una referencia mundial. Su creatividad parece no tener límites y se asienta sobre una técnica absolutamente prodigiosa, explorando todas las posibilidades de la guitarra de siete cuerdas.